El territorio insular de Providencia y Santa Catalina presentó su nueva marca turística que busca resaltar la cultura y tradiciones de esta hermosa región del caribe colombiano.
“En la imagen se representan los íconos de las islas como el cangrejo negro, la cabeza de Morgan, los arrecifes, nuestro mar de los 7 colores… queremos mostrarnos como un destino único y natural.” Afirmó la Secretaria de Turismo, Esmeralda Rodríguez, Secretaria de Turismo.
La propuesta turística está enmarcada en una oferta ecoamigable, que hace énfasis en el desarrollo del turismo comunitario en la medida en que los grandes protagonistas del servicio son los mismos miembros de la comunidad raizal.
Es así como, por ejemplo, la infraestructura turística de las islas tiene su mayor fortaleza en la existencia de 72 posadas isleñas, que se definen como la extensión de la familia raizal. Estos albergues lograron en los últimos tres años responder a los estándares de calidad exigidos nacionalmente.
También se ha trabajado en integrar los oficios populares a la actividad turística. De esta forma, la oferta gastronómica se nutre exclusivamente de lo que los pescadores artesanales logran ganarle al mar de los siete colores y lo que los agricultores recolectan en el bosque.
“En la Vieja Providencia y Santa Catalina islas cualquier vivienda es hotel, cualquier cocina restaurante, cualquier isleño guía. El renglón del turismo se ha insertado de una manera certera dentro del libreto de los isleños.” Aseguró Rodríguez.
De hecho, el 31 por ciento de la población económicamente activa deriva su sustento de la actividad turística, por eso los isleños se sienten preparados para abrir sus puertas a un viajero dispuesto a la aventura y, “en consecuencia, se ha creado una marca que ha de distinguir al territorio insular menor de la oferta turística de otros lugares de Colombia y del Gran Caribe.”
En 2017 llegaron al territorio más de 30 mil visitantes, que fueron atendidos en 15 hoteles pequeños y 72 posadas nativas. Para el 2018 se espera que esa cifra crezca hasta los 32 mil pasajeros.
Oferta turística para todos los gustos
La Vieja Providencia y Santa Catalina islas ofrecen distintos tipos de turismo; cuentan con hermosas playas, unas coralinas otras volcánicas, todas ellas ausentes de vendedores ambulantes, pero con todos los servicios que un viajero puede requerir.
Cuenta con la tercera barrera arrecifal más importante del mundo y la más viva, lo que garantiza una enorme riqueza marina. Además por su carácter volcánico son poseedoras de un bosque rico y en gran medida virgen.
De las montañas brotan ojos de agua dulce que van marcando hermosos senderos; el más emblemático The Peak o El Pico, una cima a 360 msnm que tiene una visión de 360 grados. Esta condición también trae consigo una gran variedad de pájaros, unos endémicos otros migrantes, pero todos de importancia para quienes se dedican al avistamiento de aves
Quizás la mejor razón para visitar las islas es tener el honor de compartir con una comunidad única, la comunidad raizal que brinda al visitante raza, lengua, historia, religión, cultura, ello en una inexplicable y aún muy preservada relación divina con la naturaleza.
De acuerdo con el Alcalde Bernardo Benito Bent Williams “estamos apostando al turismo ecológico creemos en la sostenibilidad, en conservar y proteger lo que tenemos, nuestro visitante está interesado en el bienestar, el descanso, la tranquilidad y el encuentro con la naturaleza”.
La reciente inauguración del Cotton Tree Spa es otro componente, un valor agregado para ofrecer la relajación que busca el turista que llega a la Isla, el spa entra a formar parte de la oferta turística.
Ubicado en el sector sur de la isla de Providencia el Cotton Tree Spa es un centro de relajación que abrió sus puertas hace cuatro meses y que convoca las competencias que en términos de sanación han desarrollados miembros de la comunidad raizal. Ritos y leyendas, naturaleza y experiencia de las manos isleñas hacen que esta nueva oferta consolide el territorio como un destino de salud y bienestar.